Escena de la ópera El holandés errante presentada por la Ópera Estatal de Baviera. [Foto/Observador de Shanghai]

Durante las recientes vacaciones del Día Nacional y el Festival del Medio Otoño en Shanghai, los principales teatros de la ciudad ofrecieron una vibrante programación de espectáculos nacionales e internacionales.

Obras destacadas tales como la ópera El holandés errante, el drama de danza de flamenco Carmen, la pieza teatral El día más largo en Chang'an y la Ópera de Pekín La leyenda de la serpiente blanca, no solo deleitaron al público local, sino que también atrajeron a numerosos turistas de otras provincias que viajaron especialmente a Shanghai para disfrutar de estas presentaciones.

Este fenómeno subraya el perdurable atractivo de las bellas artes y revela una nueva tendencia en el consumo cultural y turístico: el arte se está convirtiendo en un potente motor del consumo en la ciudad.

El evento estrella durante estas vacaciones fue, sin duda, Resonancia de Baviera: Festival de Ópera del Gran Teatro de Shanghai 2025. La Ópera Estatal de Baviera (Bayerische Staatsoper) de Alemania, una de las casas de ópera más prestigiosas del mundo, regresó a Shanghai tras 41 años. Del 1 al 6 de octubre, la ópera y su orquesta "residieron" en el Gran Teatro de Shanghai, presentando tres funciones de El holandés errante, dos versiones de concierto de Otelo y un concierto, todas ellas parte del cartel de la 24ª edición del Festival Internacional de Arte de Shanghai de China.

Según estadísticas del Gran Teatro de Shanghai, el 98% de las entradas para las seis representaciones fueron vendidas. Las cuatro funciones del 1, 3, 4 y 6 de octubre agotaron todas las entradas. Además, se informó que el sector de la gastronomía en los alrededores del Gran Teatro de Shanghai creció un 18% durante los días feriados y, al mismo tiempo, las ventas de productos culturales y creativos superaron los 100.000 yuanes (14.000 dólares), creando una interacción positiva entre la asistencia a espectáculos y el consumo.

El Centro de Arte Oriental de Shanghai, ubicado en la Nueva Área de Pudong, también brilló con luz propia durante las vacaciones. El Ballet Flamenco de Madrid, considerado un "tesoro nacional" de España, presentó tres funciones de Carmen, permitiendo al público experimentar los sabores auténticos de la pasión y el dinamismo de la danza ibérica. El concierto del coro infantil de Viena en conmemoración del 200º aniversario del nacimiento de Johann Strauss II también cautivó el corazón del público. Un total de alrededor de 15.000 personas acudieron al Centro de Arte Oriental de Shanghai durante los ocho días para disfrutar de unas agradables vacaciones.

Estas cifras indican que el arte está generando un enorme potencial de consumo. Un aficionado a la música clásica que viajó desde Beijing comentó: "Pasar una semana en Shanghai, viendo ópera de una de las casas de ópera más importantes del mundo, ¡es una experiencia maravillosa!". Y este visitante no es una excepción. Según estimaciones preliminares, estos turistas que viajan "por un espectáculo" gastan un 30% más que el turista promedio en Shanghai. Buscan experiencias únicas y recuerdos que puedan atesorar. Este modelo de consumo de alta calidad y alto valor agregado se está convirtiendo en un valioso punto de crecimiento para el mercado turístico-cultural actual.

Fuente: Observador de Shanghai