Fernando Sánchez en su espacio deportivo Paidile. [Foto/Xinmin.cn]

El sueño deportivo de Fernando Sánchez se hace realidad en la Nueva Área de Pudong. Este ingeniero civil español enriquece la vida deportiva de los habitantes de Shanghai, introduciendo en la ciudad una novedosa modalidad de deporte de raqueta divertida, el pádel.

Nacido en Madrid, Sánchez llevó a cabo sus estudios universitarios en Granada y luego inició una exitosa carrera profesional de casi diez años en ingeniería civil en toda Europa, destacándose en proyectos de restauración arquitectónica. En su tiempo libre, jugar al pádel se convirtió en su pasión.

En 2013, regresó a Madrid para cursar un MBA. En el segundo año académico, tuvo la oportunidad de estudiar tres meses en el extranjero y eligió China como destino. Durante su estudio en la Universidad Tecnológica de Nanjing, enseñó a sus compañeros chinos a jugar pádel. En el mismo periodo, conoció a su esposa china, Coco, que trabajaba en una empresa española en Shanghai. Por amor a Coco, Sánchez renunció a su trabajo en Europa y se mudó a Shanghai. Con su compañía, Coco también aprendió a jugar al pádel y le dio un nombre chino paide (cuya pronunciación en chino coincide con la manera de jugar el deporte de raqueta).

Como aficionado del pádel, Sánchez comprende la popularidad de este deporte entre los extranjeros y ve la actitud abierta de Shanghai hacia esta actividad emergente. En 2022, con el respaldo de entidades como el Buró de Deportes, Cultura y Turismo de la Nueva Área de Pudong, transformó con éxito su pasión personal en un negocio. Abrió la cancha de pádel en el Centro Deportivo de Yuanshen en el distrito y estableció su empresa Shanghai Paidile Sports Culture Development Co Ltd.

La cancha de pádel de Fernando Sánchez. [Foto/Xinmin.cn]

Pasando de ser ingeniero civil a empresario de industria deportiva, logró un próspero desarrollo en su negocio y estableció amistades significativas en el país asiático. Desde que llegó a China para estudiar en 2014, Sánchez ha vivido casi una década en el país, donde ha conocido a muchos amigos y familiares. “Todos me apoyan calurosamente”, dijo Sánchez. Además, según él, el volumen de ventas de reservas para el fin de semana de su pista de pádel es bastante bueno.

Para los extranjeros, el pádel es una forma familiar de hacer ejercicio, mientras que para los chinos es una experiencia nueva. Originario de los cruceros intercontinentales del siglo XX, el deporte vio la luz en 1969 con la primera pista oficial en tierra en México. Esta actividad recreativa, que se parece mucho al tenis, destaca por su enfoque en la diversión y la interacción social.

Sánchez valora los atributos sociales de este deporte. "Es una actividad deportiva y al mismo tiempo social", destacó varias veces. Por lo tanto, en Paidile, el espacio deportivo fundado por Sánchez en el Centro deportivo Yuanshen de Pudong, además de dos pistas de pádel estándares que pueden acoger a ocho personas al mismo tiempo, el ingeniero español también reserva una amplia zona de césped para realizar yoga, instalar un cine y otras áreas funcionales para satisfacer las diversas necesidades sociales y de entretenimiento de los clientes.

Fernando Sánchez (séptimo desde la derecha) y los entusiastas de pádel. [Foto/Xinmin.cn]

Chen Yanliang es uno de los clientes que frecuenta Paidile. Impresionado por la sinceridad de Sánchez y atraído por la diversión del pádel, el espacio de Sánchez se convirtió en su lugar favorito para reunirse con amigos. En sus palabras, "es simplemente divertido".

Sánchez espera que más amigos chinos se unan a su cancha de pádel para disfrutar juntos, relajarse, socializar y hasta contemplar las estrellas, enriqueciendo así la experiencia con diversidad cultural. Señaló que su espacio podía ofrecer clases tanto en inglés como en español. Y quería incorporar entrenadores locales de Shanghai que puedan ofrecer instrucción en shanghainés, mejorando así la localización de su negocio en la ciudad.

Fuente: Xinmin.cn