Nota del editor:

Le Thi Hai Yen, de Vietnam, exalumna de la Universidad Normal del Este de China, comparte con nosotros sus historias sobre estudiar y trabajar en China. Actualmente es la vicegerente general del Sudeste Asiático en Jiangsu Feiliks International Logistics Co.

Le Thi Hai Yen posa para una foto con el regalo entregado por la Universidad Normal del Este de China a los exalumnos en la universidad en Shanghai el 27 de marzo. [Foto cedida a la Comisión Municipal de Educación de Shanghai]

Soy Le Thi Hai Yen de Vietnam. Antes de venir a estudiar en China, fui estudiante universitaria en la Academia de Periodismo y Comunicación de Vietnam. Mi segundo idioma es el ruso.

En ese momento, no sabía chino, pero mi mejor amiga de la Universidad Normal de Hanoi me sugirió fuertemente que tomara cursos en línea del idioma chino en la Universidad Normal del Este de China. Gracias a esto, inicié mi viaje en el aprendizaje del chino.

La profesora que me enseñó chino en ese momento resultó ser una estudiante de doctorado en la Universidad Normal del Este de China (ECNU, por sus siglas en inglés). Ella me informó que el Departamento de Relaciones Internacionales de la ECNU acababa de comenzar a reclutar estudiantes internacionales ese año.

Cuando me preguntó si quería venir a la ECNU para cursar una maestría, consideré que era una oportunidad de oro. Por lo tanto, me esforcé al máximo para ser aceptada en la universidad.

Los tres años que pasé en China fueron un período crucial y significativo que transformó mi vida.

Dado que me especialicé en relaciones internacionales, mis clases tenían un carácter marcadamente internacional. Además de profesores de China y Estados Unidos, también tuve la oportunidad de comunicarme con compañeros de más de una docena de países. Realmente disfruté de esta atmósfera internacional.

Le Thi Hai Yen y sus compañeros participan en una actuación de danza del dragón en Shanghai. [Foto cedida a la Comisión Municipal de Educación de Shanghai]

Aparte de mi vida académica, también participé en diversas actividades como un desfile de dragones y una presentación de la Ópera de Pekín en un festival cultural.

La participación en las numerosas actividades organizadas me ha vuelto más abierta y segura. Si desea llevarse mejor con otros estudiantes internacionales, debería tomar la iniciativa de hablar con ellos y luego comprender su cultura y costumbres. Esto me ha ayudado enormemente en mi trabajo, donde tengo que tratar con clientes de Corea del Sur, Japón e India. Puedo ponerme en su lugar y entender lo que están tratando de expresar.

Todavía recuerdo la celebración del 70º aniversario de la ECNU. Fue el año en que la epidemia estaba descontrolada en Vietnam y muchas ciudades estaban bajo confinamiento. Permanecí frente al hito de mi pueblo natal y envié mis mejores deseos a mi alma mater con miedo y aprensión. Al reflexionar sobre esta experiencia, la escena aún permanece vívida en mi memoria. Sin el apoyo y afecto de mi querida ECNU, probablemente no habría tenido el coraje de expresar mi amor hacia ella.

Cada estudiante internacional se enfrentará a un dilema al graduarse: quedarse en China o buscar empleo en su país de origen. Aquí hay algunos consejos.

Primero, si está considerando quedarse, tener un dominio del chino y comprender bien la cultura china es definitivamente una ventaja insustituible.

En segundo lugar, es importante conocer en qué área puede destacar y cuáles son sus fortalezas.

En tercer lugar, intente determinar cuál será la industria más prometedora entre China y su país, y luego piense en lo que puede aportar a esta industria.

Por último, pero no menos importante, sería beneficioso agudizar su capacidad de pensamiento crítico para poder tomar decisiones y emitir juicios de manera independiente.

Después de graduarme de la ECNU, descubrí que en Vietnam había una gran cantidad de oportunidades laborales debido al auge económico. Como resultado, los jóvenes que habían estudiado en el extranjero eran más populares entre los empleadores. Debido a esta situación, regresé a Vietnam y trabajé para un grupo internacional francés durante dos años antes de dar el salto a la empresa en la que trabajo actualmente.

Para expandir aún más el negocio, la empresa quería establecer sucursales en el extranjero, y me seleccionaron debido a mi experiencia global. Con el tiempo, me familiaricé cada vez más con el negocio. Creo firmemente que, si está dispuesto a esforzarse, verá resultados. Después de aproximadamente cuatro años, me asignaron la responsabilidad del mercado del Sudeste Asiático.

Soy optimista respecto al futuro de China. En las últimas dos décadas, todas las industrias han experimentado un rápido crecimiento, y la economía china se ha vuelto cada vez más sostenible. Me siento afortunada de ser testigo y beneficiaria de este período, y estoy agradecida por todo lo que he obtenido en la ECNU.

Estoy ansiosa por compartir mi experiencia laboral con mis compañeros cuando nos encontremos y seguir manteniendo la relación con las personas increíbles de la ECNU.