Nota del editor: Hemos pedido a expatriados que viven en China que compartan sus historias sobre las ciudades en las que trabajan y viven. Natalia Bak es de Polonia y ahora es estudiante en la Universidad de Contabilidad y Finanzas Lixin de Shanghai.

China sin duda se sitúa a la vanguardia de la innovación y los avances tecnológicos, lo que la convierte en un destino ideal para cualquier persona que busque una educación de vanguardia.

Sus universidades figuran constantemente entre las mejores del mundo, ofreciendo un espectro de programas que abarcan diversas disciplinas.

Actualmente soy estudiante en la Universidad de Contabilidad y Finanzas Lixin de Shanghai (SLU, por sus siglas en inglés), que tiene una historia que se remonta a 1928, cuando fue fundada por Pan Xulun, un famoso educador honrado como el "Padre de la Contabilidad Moderna en China".

El nombre mismo, "Lixin", proviene de un dicho de los "Analectas de Confucio": "Sin credibilidad, no tendrás un lugar en el mundo".

Creo que Lixin es una gran universidad que ofrece una variedad de oportunidades y atrae a estudiantes excelentes de todo el mundo.

También creo que estudiar en China enriquece las posibilidades de empleo futuro y te permite adquirir habilidades esenciales para destacar en el mundo globalizado actual, haciendo que tu currículum sea algo extraordinario.

China abre las puertas a perspectivas de carrera ilimitadas. Yo misma he asistido a muchos eventos de networking y negocios en Shanghai.

Otra ventaja es la influencia global del país y la floreciente economía que proporciona un espacio para que los estudiantes se relacionen con corporaciones multinacionales, startups y líderes de la industria. Como resultado, puedo decir que estudiar en China ofrece una combinación incomparable de riqueza cultural, excelencia académica y amplias oportunidades para el crecimiento personal y profesional.

China es un centro global de educación que atrae a estudiantes de todo el mundo con su dinámico ambiente de aprendizaje y diversas opciones educativas.

Estudié mandarín durante dos años antes de venir a China, pero solo después de mi llegada finalmente tuve la oportunidad de poner en práctica mis conocimientos y comenzar a usar el idioma a diario.

China es un lugar perfecto para cultivar la competencia en mandarín, lo que te permitirá tener una comprensión más profunda de la cultura y la historia china, permitiéndote forjar amistades duraderas y tener un mejor intercambio cultural.

Otro aspecto de ser estudiante en China es la diversidad cultural. China es uno de los países más grandes del mundo y, por lo tanto, es culturalmente diverso, abarcando una amplia variedad de grupos étnicos, tradiciones, idiomas y costumbres en su extensa geografía.

Natalia Bak (a la derecha) asiste a una ceremonia del té vistiendo un traje tradicional hanfu. [Foto cedida a la Comisión Municipal de Educación de Shanghai]

El grupo étnico han constituye la mayoría de la población china, pero China también es hogar de 55 grupos étnicos minoritarios, cada uno con su patrimonio cultural único.

El tamaño de China también resulta en una considerable variedad geográfica. Desde las regiones subtropicales en el sur hasta las provincias del norte, cada región tiene sus propios dialectos, cocinas e incluso estilos arquitectónicos únicos. Por ejemplo, los delicados sabores de la comida cantonesa son muy diferentes de los sabores intensos y picantes de la cocina de Sichuan.

Los estudiantes que se sumergen en la diversa cultura de China se encuentran en el nexo de la modernidad y la tradición.

El país ofrece una diversidad de experiencias que promueven una cultura impregnada de historia pero que cambia rápidamente, desde la majestuosa Gran Muralla hasta las concurridas calles de Shanghai.

Mientras viaja por China, también tendrá la oportunidad de descubrir la rica variedad de arte, que va desde la ópera china tradicional, pasando por danzas folclóricas regionales, hasta ceremonias de preparación de té.

Las universidades chinas también se esfuerzan por integrar a los estudiantes en diferentes actividades culturales. Organizan viajes temáticos, invitan a profesionales específicos y le ayudan a descubrir el patrimonio cultural de la nación.

Natalia Bak (segunda desde la izquierda) participa en el primer Festival Cultural de Estudiantes Internacionales con sus amigos en la SLU el 25 de octubre. [Foto cedida a la Comisión Municipal de Educación de Shanghai]

Me gustaría mencionar las amistades y los recuerdos inolvidables que adquirirá durante su período de estudio en China. Sin duda, es un viaje lleno de nuevas amistades con personas de todo el mundo, intercambios culturales y experiencias increíbles que nunca olvidará. Además, la calidez y hospitalidad del pueblo chino son realmente extraordinarias, y sin duda podrá crear un recuerdo duradero.

En general, estudiar en China abre la puerta a un mundo de posibilidades: una oportunidad para ampliar horizontes, conocer gente de diferentes ámbitos empresariales y culturales, abrazar un rico patrimonio cultural y adquirir habilidades que impulsen el éxito futuro.

No es solo un esfuerzo educativo, es una aventura que transforma a los individuos en ciudadanos globales preparados para generar un impacto significativo en un mundo en constante evolución.

Además, un consejo que puedo dar a alguien que está planeando estudiar en China es viajar, adentrarse en las pequeñas calles, probar la comida en los restaurantes locales e interactuar con la gente local, que es extremadamente amable y servicial.

Intenta descubrir China durante su período de estudio, explora diferentes cocinas, aprende sobre las diferencias culturales y la historia, y disfruta de tu tiempo aquí, ya que sin duda será una de las experiencias más grandiosas de tu vida.