Un viaje impresionante
Sanmao (三毛) , una de las escritoras chinas más prolíficas, dijo una vez: "Una persona que al menos tiene un sueño, tiene una razón para ser fuerte (一个人至少拥有一个梦想,有一个理由去坚强)", y no puedo estar más de acuerdo con esta maravillosa cita, que considero totalmente la base de mi proyecto de vida.
Después de dos años y medio de incertidumbre sobre si los estudiantes internacionales podrían o no regresar a las aulas para asistir a los cursos de la Universidad de Estudios Internacionales de Shanghai (SISU, por sus siglas en inglés), debido a que una pandemia inesperada afectó negativamente al mundo entero, finalmente logré llegar a China para llevar a cabo mi sueño en su totalidad.
Al principio, establecerme en Shanghai y adaptarme a la vida aquí, especialmente viniendo de un país latinoamericano con notables diferencias con China, fue casi un desafío insuperable. No obstante, a medida que pasaba el tiempo, todo comenzó a ser más fluido, no solo debido a la fuerza interna que tiene el ser humano para adaptarse a nuevas condiciones y escenarios, sino también porque me crucé con personas maravillosas cuya ayuda tuvo un valor fundamental en mi crecimiento y desarrollo aquí, en China.
El 20 de febrero de 2023, comenzamos oficialmente las clases y estaba considerablemente emocionado por conocer, por primera vez cara a cara, a mis compañeros y profesores, algo que anhelaba constantemente desde 2020. Además, siempre he esperado tener este sentido de pertenencia, saber que realmente pertenezco a esta universidad, que realmente soy parte de la SISU.
[Foto cedida a chinadaily.com.cn]
Encontrarme con mis compañeros fue un momento interesante, ya que nunca en mi vida pensé que podría estar, en el mismo lugar, con un grupo de personas provenientes de partes del mundo que solo había visto en libros y películas. Personas de Serbia, Vietnam, Tailandia, Uzbekistán, Tayikistán, Sri Lanka, Rusia, Nigeria y, por supuesto, yo, de Perú, reunidos en el mismo lugar, aprovechando al máximo las clases y la experiencia de ser estudiantes en una universidad llena de prestigio y trascendencia como la SISU, fue uno de los momentos más relevantes que he disfrutado, especialmente por las cosas que estas personas tienen para compartir conmigo, lo cual me cautivó enormemente.
[Foto cedida chinadaily.com.cn]
Debo reconocer que gracias a la organización de una gran cantidad de actividades por parte de la SISU, como visitar muchos lugares tradicionales y turísticos en Shanghai, así como participar en cursos extracurriculares que involucran artes chinas, como caligrafía, recortes de papel, etc., tanto yo como mis compañeros y otros estudiantes internacionales de diferentes clases pudimos consolidar muchas amistades a largo plazo y enriquecer las relaciones interpersonales. La manera en que pensamos, el trasfondo de nuestras ciudades de origen, nuestras costumbres, creencias y otros elementos que nos constituyen hacen que esta experiencia en el campus sea una de las más importantes en mi vida, habiéndome cambiado hasta el punto de sentirme bastante satisfecho con los resultados obtenidos.
Además de la importancia de mis compañeros en esta nueva aventura y los momentos llenos de alegría que hemos experimentado, mis profesores también han jugado un papel fundamental. Bajo su orientación, con una profunda experiencia en el campo de la educación y la lingüística, y una actitud optimista hacia nosotros, pude convertirme en un estudiante más profesional y bien instruido. Además, los espacios que todos mis laoshi
siempre crearon fueron seguros para que pudiéramos expresar nuestras opiniones libremente, con absoluta asertividad para respetarnos mutuamente y sentirnos completamente motivados para extraer lo mejor de las clases. Tengo que agregar que, gracias a ellos, mi interés por la pedagogía ha aumentado significativamente, concluyendo que estoy en el camino correcto de mi carrera.
[Foto cedida a chinadaily.com.cn]
Otro aspecto que no se puede pasar por alto es la relación construida con los profesores de la Oficina de Asuntos de Estudiantes Internacionales, que también ha tenido un gran impacto en mí. Siempre nos brindan información precisa y a tiempo. Además, se preocupan por nosotros, ofreciéndonos muchas oportunidades que mejorarán nuestras vidas profesionales y personales.
Por ejemplo, recuerdo que una vez fui a la oficina para pedir información y, de repente, una de los profesores me preguntó si quería participar en una audición para el anuncio institucional. Al principio, me sentía un poco tímido y reticente debido a mi personalidad, ya que no me gusta estar en el centro de atención la mayor parte del tiempo. Sin embargo, ella amablemente me animó, diciéndome que no tuviera miedo y que podría superarlo. Como resultado, entre las personas que participaron en la audición para los papeles principales y secundarios, fui seleccionado para el papel secundario. Esta experiencia me brindó la oportunidad de ser uno de los rostros de los anuncios de la SISU, lo que me hizo sentir muy orgulloso de mí mismo, ya que el director también me felicitó, diciendo que mi participación estaba llena de naturalidad y encanto. A partir de ese momento, comencé a tener más confianza en mí mismo, siendo consciente del potencial que tengo para enfrentar cualquier desafío que se presente.
[Foto cedida a chinadaily.com.cn]
Durante este tiempo en la Universidad de Estudios Internacionales de Shanghai, he notado un gran cambio positivo en mí. En mi vida profesional, a través de la SISU, he logrado hacer amigos increíbles, cuyas relaciones también se beneficiarán mutuamente de los puentes que podamos crear en el futuro cercano para mejorar nuestros países y nuestras vidas personales. Además, mi nivel de chino ha llegado a un punto en el que soy realmente fluido, al punto de sostener conversaciones largas con personas chinas, leer textos complejos y entender cualquier conversación en la que participe. En mi vida personal, la vida en el campus me ha ayudado a ser una persona más fuerte, determinada y menos tímida, creyendo que el cielo es el límite y que soy lo suficientemente capaz de superar cualquier dificultad.
La SISU siempre estará en mi corazón, porque gracias a ella, he sido moldeado en el profesional que soy hoy en día. ¡Esto es solo el comienzo!